Cristiano ex-rehén del EI en Siria: «al final nos iremos todos»

Habla uno de los cristianos que habían sido secuestrados a finales de febrero y que fue liberado después del pago para su rescate. «Si volvemos a nuestras aldeas nos van a matar»

REDACCIÓN
ROMA

«Al final nos iremos todos, porque los yihadistas nos advirtieron que, si volvíamos a nuestras aldeas, decapitarían a los hombres y esclavizarían a las mujeres». Lo dijo a la agencia asiria Aina uno de los 21 cristianos secuestrados por el llamado Estado Islámico (EI) en el valle de Khiabur, en el noreste de Siria. Fueron liberados después de que se pagara su rescate. Según la Aina son entre 262 y 373 los cristianos asirios secuestrados en la región. Otros miles huyeron y, subraya el ex-rehén, «no queda un solo cristiano».

El testigo, a quien la agencia presenta con el nombre de Robert, forma parte de los 21 cristianos secuestrados por los yihadistas en Tel Goran, una de las 35 localidades que se encuentran a lo largo de la orilla del río Khabur, al oeste de Al Hasakah. El pasado 23 de febrero fue la ofensiva de los milicianos del EI. Fueron secuestrados muchos cristianos (alrededor de 300). El primero de marzo fueron liberados 19 y el tres de marzo otros 4, incluida una niña de 6 años con su madre.

El hombre dijo que los rehenes habían recibido un buen trato, fueron nutridos y pudieron incluso lavarse. «Insistían que teníamos que convertirnos al Islam -añadió ‘Robert’-, pero no nos maltrataron».

Su liberación fue posible tras el pago de una suma justificada como «yizya», es decir el impuesto que, según una vieja tradición del islam, las poblaciones no musulmanas deben pagar a cambio del derecho a seguir viviendo con seguridad en un estado islámico. Pero, como habrían amenazado a los cristianos diciéndoles que no volvieran a sus casas, en este caso sería simplemente un rescate.